Parecen
confirmarse los pronósticos. Después de muchos días fríos y azules, y un fin de
semana primaveral, llega un brusco cambio de tiempo. En pocas horas pasaremos
de la primavera al más crudo invierno.
Desde
mañana hasta el jueves, viento, lluvia, frío y nieve en las montañas. Se asomará
el sol a ratos, según días, pero se notará poco. Jornadas desapacibles,
claramente invernales.
De
momento parece que la fiesta empezará mañana poco a poco, y aflojará algo el
martes, para volver con más contundencia el miércoles; el jueves irá
escampando. El fin de semana pinta bien. Subirán las temperaturas, aflojará el
viento, volverá el sol y podremos salir a la nieve que no estará muy lejos.
Pero
claro, es un temporal de levante
invernal lo que se nos echa encima, y estos temporales son más difíciles de
seguir y predecir que los que entran por el oeste o el norte. Cosas del
Mediterráneo. Por eso, en estas situaciones, hay que seguir las previsiones día
a día ya que puede que la semana no se parezca en nada a lo que ahora dicen los
modelos.
Dónde,
cuándo y cuánto lloverá y nevará no está claro. Lo seguro es que lo hará, el
cielo estará cubierto aunque con ratos de sol, y hará frío y viento de levante,
sobre todo la primera parte de la semana.
Las
mínimas se moverán entre los 4 y los 6 grados y las máximas no superarán los 12
o 13, pero con el viento, el ambiente húmedo, y el poco sol, la sensación
térmica será de frío riguroso.
Molestará,
pero hacía falta. Estos temporales en invierno preparan una primavera
esplendorosa y la naturaleza los necesita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario