Hoy,
último día del mes, quiero compartir algo que me resulta sorprendente y muy
significativo. Hablo de las conocidas como intenciones del Papa, y para este
mes de agosto era la siguiente:
Recemos
por la Iglesia, para que reciba del Espíritu Santo la gracia y la fuerza para
reformarse a la luz del Evangelio.
Francisco dice que la Iglesia debe reformarse a la luz
del Evangelio, y para eso necesita la fuerza y la gracia que sólo puede darle
el Espíritu Santo. Y por eso nos pide que recemos.
No quiero decir nada más; sólo os invito a que penséis en
eso de reformarse a la luz del Evangelio con
la ayuda del Espíritu Santo, de Dios mismo. Y lo dice el Papa. Ni más ni menos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario