Ya sé
que no estoy muy activo en el blog, o al menos no como en otras ocasiones. Y no
es que me falten temas de los que hablar y ganas de hacerlo, pero es que me
falta tiempo, porque no son cuestiones sobre las que escribir sin pensar bien, y
repensar y volver a pensar.
Por
eso, hoy voy a publicar algo que no requiere más tiempo que haberme levantado
de noche y ver amanecer en el monte. Las fotos del inicio de un día gris y
feucho, pero aún en un día así, hay una belleza escondida que la encuentras si
la buscas.
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