Llegué
a la tienda y me planté en el mostrador, donde un dependiente atendía a un
cliente. Yo era el próximo. Entonces Isabel me dijo, ¿has cogido número? No, no
había cogido número, no sabía que hubiera que coger número.
Entonces
me dirigí a la maquinita que estaba a la entrada del establecimiento, bien visible por cierto, y vi como
una señora, que acababa de llegar, ya había cogido su número. Y entonces, para
nuestra sorpresa, grata sorpresa, me lo dio diciendo, tome, usted estaba antes.
La
verdad es que me quedé sin reaccionar unos instantes, y después se lo acepté
con la mejor de mis sonrisas. Y me dije, sí señor, esto es educación. Una
amable y breve conversación mientras llegaba nuestro turno fue la forma de
agradecerle el gesto.
Lo
normal no es esto, ¿verdad? Lo normal es que el que coge el numerito como tiene "prioridad legal”, aunque haya llegado después, pase delante, y además piense
para sus adentros, que se joda, y otra vez que se espabile.
Eso
es lo normal. Y así nos va.
Muchas
gracias señora, de verdad. ¡Ojalá hubiera más gente como usted!
No hay comentarios:
Publicar un comentario