Me ha
sorprendido hoy esta pintada en el vertedero (no sé si legal o no) de Sot de
Chera, Sote, como también lo llaman. Como iba de ruta y solo, me ha dado tiempo
de pensar en el asunto.
Quienes
lo hayan escrito deben estar hasta las narices de la permisividad cada vez
mayor que la sociedad tiene hacia las drogas que hacen mucho más daño del que
muchos imaginan. No hay fiesta de jóvenes y no tan jóvenes sin drogas. Es de
muy fácil adquisición. Quien entra cree que puede salir cuando quiera…
¡Qué
más voy a decir! Todos los sabemos, y cada vez va a más. Son las de la pintada
palabras de indignación y hartazgo.
Pero
mola tanto lo de los porretes y todo eso. Y de ahí en adelante. Son cosas de jóvenes. No pasa nada…
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