Se me ocurrió plantar una patata grillada en una maceta. Salió una bonita planta muy decorativa, y cuando se marchitó me regaló doce patatitas que casualmente tienen un tamaño ascendente o descendente, según se mire. Ya es casualidad. Puestas en orden parecen un gusanito.
El
caso es que nos las comimos como patatas bravas. Aquí está la receta.
Ingredientes:
Patatas.
Pimentón
rojo.
Ajoaceite.
Aceite y sal.
Como
eran pequeñitas no las pelé. Las más grandes las partí en dos. Luego las herví
en agua y sal. Después las removí un ratito en aceite muy caliente, hasta que
se doraron un poco. Y para acabar, las mezclé bien con el pimentón rojo y el
ajoaceite.
Y se
acabó.
Claro está que se puede hacer esta receta con cualquier patata, no hace falta que sea de tu propia cosecha, ni tan simpaticonas como las que me salieron a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario