Otra plantita que está por todas partes ahora. Y también es tan pequeña y tan humilde que
nadie le hace puñetero caso. ¡Pero es tan bonita! Sólo hay que pararse, fijarse un
poquito, prestarle un poco de nuestra atención y nos regala toda su belleza.
Toda una lección para pensar en lo que a menudo nos perdemos en las relaciones humanas.
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