La
última semana del verano va a ser muy interesante meteorológicamente hablando;
esperemos que no decepcionante, como tantas otras veces ha pasado.
Desde
hace años “no han encajado las piezas” para originar un temporal de levante, y
así nos ha ido. Sequía y como más algún episodio de lluvias fuertes, pero
breve.
Ahora
parece que por fin encajan. Una borrasca con dirección este-oeste nos puede
alcanzar de lleno a partir del miércoles. Lo que de sí vaya a dar está por ver,
aunque casi todos los modelos hablan de lluvias importantes, incluso torrenciales
y durante varios días.
Lo que
parece seguro es que podremos disfrutar de todo un temporal de levante. Cuánto,
dónde, cómo y durante cuánto tiempo lloverá es lo que aún no está claro.
Yo no
me quiero ilusionar, pues me he dado muchos “chafones” durante años mientras la
sequía iba a más, pero esta es la ocasión más clara que veo para darle un buen
golpe desde hace mucho tiempo. Puede llover mucho y bien.
Pero
hemos de tener en cuenta que pueden darse también otros dos escenarios, ambos
desastrosos. Uno, que las lluvias sean excesivas y violentas y hagan daño.
Otro, que todo quede en nada o en muy poco.
Lluvias
aparte, las temperaturas serán agradables. Lunes y martes oscilarán entre los
15-16 y 27-28, y el resto de la semana entre 17-18 y 24-25. El cielo,
obviamente, despejado hasta el martes y cubierto o muy nuboso los demás
días. Y el viento, del noroeste mañana y de levante en adelante, flojo pero que
se notará.
Pues
esto es lo que tenemos de momento. Situación ilusionante pero con no pocos
riesgos. Lo ideal sería que nos dejara entre 200 o 300 litros a lo largo de varios
días. ¡Ojalá así sea!
219 litros en 369 días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario