Son
los atardeceres de lo poco bueno que tiene el poniente por estos lares. Ayer, nos regaló este viento un día caliente hasta el absurdo y malo, muy malo para el campo y
los montes. Muy malo.
Por
eso me dije, voy a disfrutar de lo poco bueno que tiene este odioso
vientecillo, el crepúsculo. Me había molestado con el calor improcedente que
nos trae y con la preocupación que siento siempre que sopla. Peo hay que
reconocerlo, el crepúsculo fue realmente muy hermoso.
Y
bajé al puente viejo, y mirad lo que pude contemplar.
Graciasssss por las imagenes y por todo lo que conlleva este blog.
ResponderEliminarDe nadassssss. Gracias por tu comentario.
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