FRASES PARA PENSAR.

SE DARÁ TIEMPO AL TIEMPO,
QUE SUELE DAR DULCE SALIDA A MUCHAS AMARGAS DIFICULTADES.

Cervantes en el Quijote.

miércoles, 1 de febrero de 2023

Siguiendo con la anterior entrada...


Siguiendo con la anterior entrada podríamos concluir erróneamente con una generalización, la juventud es tonta, imbécil para ser más contundentes. Y ante esto tendríamos la inevitable respuesta de que siempre los viejos han visto mal a la gente joven, de lo que deduciríamos que no hay nada nuevo bajo el sol y no hay de qué preocuparse. Postura esta inmovilista y ferozmente conservadora. Dejemos todo como está, siempre ha sido así y no pasa nada.

Y en esto se amparan los que viven de toda esa gente joven de la que se aprovechan en su propio beneficio, y los que por ignorancia, complacencia o peregrinas ideologías, miran hacia otra parte.

Hay pues que poner los puntos sobre las íes, empezando por decir que no se puede hablar de la juventud como un todo homogéneo. Hay jóvenes, responsables, comprometidos, trabajadores, de los que te puedes fiar y son además dignos de admiración. Y que desde luego, son resistentes a esa publicidad que los considera poco menos que idiotas.

Pero hay también muchos, demasiados para que no tenga repercusiones graves en el futuro de nuestra sociedad, que víctimas del sistema incoherente y perverso en el que vivimos, andan como ovejas sin pastor, o mejor, como ovejas cuyos pastores son lobos disfrazados.

El relativismo moral, la huida del esfuerzo y el compromiso, el consumismo compulsivo, el hedonismo, el culto al cuerpo, la absolutización del deporte como valor supremo, la adicción a la telebasura, la dependencia del móvil cambiando lo virtual por lo real, la permisividad con las drogas, la fiesta como alienación, el sexo únicamente como placer, las ideologías radicales… Un  saco lleno de podredumbre en el que se mueven, consumiendo diariamente esa podredumbre, demasiados jóvenes. Y a ellos, desde distintos sectores económicos, va dirigida esa publicidad que si bien la miramos, es el mejor indicador del mundo en el viven.

¿Ha sido siempre así? Creo que no. Me niego a caer en la trampa de pensar que porque ya soy mayor, viejo si queréis, veo las cosas como las veían mis padres cuando yo era joven.

Pensar eso equivale a dejar las cosas como están.

Y no están bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario