Vamos a hacer algo. Conclusiones.

En un mes, un  pino verde y frondoso se queda así.

Después de las reuniones en el ayuntamiento y con la plataforma “Salvem Portxinos”, de analizar la respuesta escrita del Sr.Alcalde, de hablar con gente, de seguir pateando el monte y de pensar… ¿Cuáles son nuestras conclusiones? ¿Qué vamos a hacer? A estas dos preguntas voy a tratar de responder desde la humildad de quien sabe que, después de todo, bien poco sabe y desde el convencimiento de que algo hay que hacer, aunque sea insignificante, ante la magnitud del desastre medioambiental al que nos enfrentamos.

En esta entrada os presento nuestras conclusiones, siempre sujetas a modificaciones según el devenir de los acontecimientos. En la próxima hablaremos de actuaciones.

CONCLUSIONES.

1ª La plaga del tomicus, orthotomicus e ips sexdentatus es consecuencia directa de la sequía extrema que esta zona de la Comunidad Valenciana está soportando desde hace años. Los insectos son autóctonos y en condiciones normales, están dentro del equilibrio ecológico, roto por la citada sequía, y no provocan daños.

2ª Esta plaga, de no llover abundantemente antes de la primavera, puede reactivarse y aumentar la magnitud del desastre sin que podamos hacer casi nada o nada por evitarlo, dadas tanto la extensión alcanzada, como las condiciones favorables para su expansión si no ha llovido a tiempo.

3ª En la zona de las Rodanas, en La Selleta y en La Vallesa sí que se ha actuado y se está actuando, no sé si a tiempo y con suficientes medios, dadas las condiciones climáticas y la virulencia de la plaga. En concreto, el ayuntamiento de Ribarroja, ya el 21 agosto de 2014 solicitó de la Consellería un plan de vigilancia y control, e insistió el 6 octubre. Este plan se publicó el 29 del mismo mes. El 10 de noviembre, el ayuntamiento solicitó información sobre las actuaciones concretas que se fueran a desarrollar. El 15 de diciembre envía nuevo escrito diciendo que aún no se les ha notificado ninguna actuación. Algo así puede haber pasado en las Rodanas. Concluimos que la respuesta de Consellería ha sido y está siendo lenta y limitada, probablemente por falta de medios.

4ª La Selleta o “Les Mamelles” resisten de momento, debido a que el terreno no es como el de Las Rodanas y retiene mejor la poca agua que nos llueve. Los pinos afectados están siendo vigilados de cerca y no se observa que se extienda la plaga actualmente. Por otra parte, al ser propiedad privada, se están haciendo las gestiones oportunas para poder Intervenir en el caso de que sea necesario. (Ver punto 6)

5ª Según los técnicos, la intervención más directa y eficaz es talar, descortezar y trocear los pinos que empiezan a amarillear, no los ya muertos, que no hay prisa por retirarlos del monte. Todo este proceso está publicado detalladamente en el anexo 1 de la orden 25/2014 del 29 de octubre. Sin embargo, y estamos en febrero, por aquí no, pero por otras zonas, sí vemos pinos amarilleando sin que nadie intervenga. Se evidencia la falta de medios.

6ª El hecho de que muchas masas forestales sean propiedades privadas condiciona posibles actuaciones. Pensamos que esta eventualidad, sobre la que ya se está actuando, debería haberse previsto mucho antes. La Consellería ha dado un plazo a los propietarios parta actuar, pasado el cual, aparte de sancionar, actuará de modo subsidiario. Este plazo es el 30 de marzo. A todas luces, tarde. Ya es primavera.

7ª En estos momentos la intervención directa de los vecinos en esta cuestión no tiene sentido. Primero porque ahora, al menos aquí, la plaga está parada y luego, si se reactivara, las tareas a realizar son propias de profesionales. En cualquier caso habría que contratar más profesionales. Los vecinos podríamos trabajar, en un futuro, en tareas de repoblación debidamente organizadas.

8ª  Entendemos también que en éste, como en otros asuntos, la falta de información nos lleva a generalizaciones vanas y simplistas, y conclusiones erróneas, lo que dificulta cualquier actuación posterior, que para ser eficaz debe de estar suficientemente fundada en hechos y no en opiniones. Pero esta falta de información, muchas veces es responsabilidad del ciudadano, más que de la administración. Informarse exige trabajo. Y aquí entono el “mea culpa”.

9ª La politización extrema de estas cuestiones, identificando la preocupación por el tema medioambiental con ideologías llamadas “de izquierdas” (término en el que no creo pero que utilizo aquí para entendernos) y la inclusión del movimiento ecologista en las citadas ideologías, complica muchísimo cualquier actuación, al haber convertido al medio ambiente en una cuestión puramente política.

10ª La indiferencia social ante la naturaleza es alarmante. Curiosamente, la época en que parece más presente, creo yo, es en la que más ausente está de nuestras vidas diarias. Sé de mucha gente de Ribarroja y Villamarchante que no se habían dado cuenta del desastre de las Rodanas, y de muchos que aún no se han dado cuenta y de otros que cuando se den cuenta, si se dan, les importará un bledo. El único verde, el del campo de fútbol. El único aire, el acondicionado. El único cielo, el que siempre sea azul. La única agua, la embotellada.

      Estas son las conclusiones. En la próxima entrada posibles actuaciones porque el no poder actuar directamente en el monte, no significa que no podamos hacer nada. Es importante actuar, pero hacerlo debidamente informados, al margen del juego político y de un modo organizado, utilizando las instituciones y las redes sociales.