Así entró ayer la primavera en el Pirineo. Nada
primaveral. Gris y fresco. Nieve en las montañas, árboles desnudos y suelo
todavía pardo. Volverá a nevar, es lo normal. Pero la vida, como cada año, muy
humildemente irá abriéndose paso. Ya hay signos, pequeñas florecillas nos lo
anuncian.
Y sigue lloviendo en Valencia. ¡Genial! Este año
tendremos primavera por aquí. Esta vez no me ha resultado desalentador el
contraste entre el Pirineo y ese maltrecho rinconcito donde vivimos. ¡Ya era
hora! Viaje de regreso lloviendo y domingo por la tarde gris, gris, gris…y con
la perspectiva de más lluvia. Esto es lo que hacía falta, ¡pardiez!
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| Son pequeñitas, pero ya anuncian la primavera. |
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| Mientras los árboles siguen desnudos. |
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| La nieve cubre las montañas. |
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| El cielo cerrado anuncia más nieve. |
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| El frío sigue siendo el dueño y señor de las montañas. |
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| Al circo de Pineta aún le queda invierno; pero la primavera entrará poco a poco por el valle, hasta que lo alcance y lo trasforme. |
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