Quince
días más de estado de alarma, ¡menos mal!, en medio de un panorama desolador.
Los políticos enfrentándose entre sí, para variar; la enfermedad repuntando
levemente, de momento; y un aluvión de normas absurdas y contradictorias, y
muchas contraproducentes, confundiendo, irritando y asfixiando a la ciudadanía.
Es
justo lo contrario de lo que necesitamos. Necesitamos ver a nuestros políticos
unidos contra el verdadero enemigo. Necesitamos ver normas claras y coherentes
para saber a qué atenernos, y hacerlo con convencimiento. Necesitamos que nos
digan que la situación sanitaria va definitivamente mejor. Y todo eso nos daría
esperanza.
Después de tanto tiempo, es lo
que ahora necesitamos, y no tenemos.
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